Por evitar emisiones, Argentina recibirá 82 millones de dólares para invertir en sus bosques

Hace algunos días Argentina recibió una muy buena noticia en cuanto su trabajo ambiental: el Fondo Verde del Clima (o Green Climate Fund, de la ONU) aprobó un pago de US$ 82 millones en reconocimiento de la deforestación evitada entre 2014 y 2016.

En esos tres años (2014, 2015 y 2016) Argentina demostró evitar la emisión de 165.000.000 toneladas de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y se ganó así el reconocimiento y el dinero que el GCF prevé para los países que alcancen su objetivo.

"Las emisiones se pueden reducir desde la transición a energías renovables; en el agro con menos vacas para emitir menos metano; y una forma importante es también evitar la deforestación", explica a Carbono.news Carlos Gentile, exsecretario de Cambio Climático y Desarrollo Sustentable de la Nación (2015-2019).

"Las emisiones se pueden evitar de dos maneras: o sin hacerlas, o evitando que aumenten. Si no se hace nada la curva de emisiones va a ser más o menos la misma, que en los países en desarrollo suele ser en ascenso", agrega.

Los países en desarrollo, explica, siempre necesitan aumentar el Producto Bruto Interno (PBI) y para eso deben consumir más energía, producir más carne y más granos... por eso es natural que la curva de emisiones sea ascendente.

"Es natural que tengamos una curva de crecimiento: si no desacoplamos emisiones vamos a emitir cada vez más", dice.

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Y específicamente con la deforestación, no es posible frenarla completamente y no desmontar nada más: hay mucha gente que vive de eso e industrias como la de la madera se morirían de hambre.

Sin embargo, Argentina se fijó una contribución ambiciosa y se comprometió a demostrar que podría evitar una gran parte de esa deforestación.

"Esto ya se fue cumpliendo básicamente con la Ley de Bosques. La curva de deforestación que venía muy alta y empezó a bajar como mérito de la ley, que logró lo que quería: hubo un pico de deforestación y a partir de entonces empezó a decrecer", recuerda Gentile.

Y ahí es cuando entra en escena el Programa Piloto de Pagos Basados en Resultados de REDD+ (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de Bosques) destinado a ayudar a los países a reducir las emisiones de la deforestación. Para aplicar al dinero que este programa ofrecía, Argentina debía completar una serie de pasos para demostrar esa reducción.

A cambio, el programa, a través del Fondo Verde del Clima, ofrece dinero para destinar a acciones que contribuyan a estos objetivos.

Para demostrar esta baja en las emisiones de GEI, hay que cumplir con cuatro pasos, basados en pilares:

1. Plan Nacional de Bosques y Cambio Climático. La "bajada a tierra" de las NDC.
2. Nivel de Referencia de Emisiones de Bosques.
3. Sistema de Información de Salvaguardas. "Para eso hay que hacer reuniones en todo el país con poblaciones indígenas, gente que vive de la madera, con todos los posibles damnificados por la baja de la deforestación", cuenta Gentile.
4. Sistema Nacional de Monitoreo de Bosques. Explicar cómo se van a monitorear a futuro para demostrar las emisiones que se evitaron.

"Lograr el pago por resultados es el final de la película", dice el exfuncionario. "Hay solamente un tiempo determinado para acceder a este pago. Y como los inventarios siempre son a dos años teníamos que pararnos sobre números que ya tuviéramos", cuenta.

Por eso se trabajó, bajo la gestión de Cambiemos, con los inventarios 2016 (que iba hasta 2014) y 2018 (que iba hasta 2016). "Tanto el inventario 2016 como el 2018 lo hicimos nosotros. Fui haciendo uno a uno los pilares", dice ahora orgulloso Gentile, cuando ve que su trabajo dio frutos.

"Argentina demostró evitar 165.000.000 toneladas en 2014-2016, pero por un tema de fondos nos pagaron solamente por 18.7 millones. Es la segunda contribución más grande de Latinoamérica después de Brasil", destaca Gentile.

La recta final

El trabajo que comenzó durante el Gobierno anterior se completó con el que desde principio de año realizó el actual equipo del Ministerio de Ambiente.

"Arrancamos desde enero con todo el armado de la propuesta, fueron 11 meses escribiéndola y haciendo todo el papeleo. Había que pasar unas etapas con un panel técnico de especialistas que te hacían una serie de preguntas", cuenta a Carbono.news Martín Illescas, director de Proyectos con Financiamiento Externo del Ministerio de Ambiente.

"La propuesta argentina pasó por diferentes países, fue aprobada por los 24 miembros del board sin ninguna objeción. Conseguimos el apoyo de todos. La propuesta fue muy robusta, muy bien vista, Canadá nos felicitó, Noruega también. Obtuvimos el mayor puntaje en la historia del Fondo para propuestas de este tipo", agrega.

Illescas supone que el dinero estará disponible a mediados de 2021 para comenzar a implementar las medidas que se tomarán, en sincronía con la propuesta: 

1. Gestión territorial de los bosques: trabajo con comunidades que viven de los productos madereros y otros. Comunidades campesinas, indígenas y pequeños y medianos productores de esta industria.
2. Manejo de bosques con ganadería integrada: "Transformación de las prácticas tradicionales silvopastoriles hacia modelos que permitan el desarrollo ganadero asegurando la sostenibilidad de los bosques nativos". Apuntado a pequeños y medianos productores ganaderos.
3. Mejora en la capacidad de respuesta ante incendios forestales. Obras, equipamiento, trabajo de prevención. "Los principales beneficiarios serán las autoridades provinciales de aplicación, tenedores de bosques, comunidades y la población urbana".
4. Capacidades de las instituciones de gobierno nacionales y provinciales fortalecidas para abordar las causas de la deforestación, el monitoreo y control. Incluye la mejora continua del Sistema Nacional de Monitoreo de Bosques Nativos, de detección temprana y prevención de incendios. Además el desarrollo de servicios de comercialización, mercados e inversiones estratégicas complementarias, así como la gestión del conocimiento. Los principales beneficiarios serán las autoridades de aplicación locales y nacional, y los beneficiarios mencionados en los componentes anteriores.

Además de este dinero, que es una de las donaciones más importantes de la historia argentina, por su monto, Illescas y su equipo trabajan en otros proyectos de financiamiento internacional.

"En materia de bosques tenemos varias cosas: un préstamo con el Banco Mundial también de bosques y comunidades que ya estamos ejecutando; uno de restauración de bosques con el gobierno alemán y la Iniciativa Internacional del Clima (IKI) alemana, y una donación que recibimos de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) para fortalecer el plan de manejo nacional de palo santo", detalla.

"La cuestión de bosques, incendios, para nosotros es prioritaria. No hay plan B porque no hay planeta B, y de los bosques depende mucho que el Planeta sea un poquito mejor", cierra Illescas.