Las Fiestas de fin de año ( Navidad y Año Nuevo) se transformaron hace ya tiempo, y cada vez más, en temporada de comprar, comprar y comprar. Este consumismo vertiginoso está perjudicando al planeta. Las compras excesivas forman parte de una cultura insostenible que está alimentando una triple amenaza planetaria: crisis climática, pérdida vertiginosa de naturaleza y biodiversidad, y niveles exponenciales de contaminación y desechos.
Es hora de ser conscientes de que toda esa parafernalia es muy perjudicial para nuestras vidas.