La separación de residuos nos permite darnos cuenta de que la mayoría de los residuos que generamos NO son basura, sino que pueden convertirse en compost o pueden ser reciclados o pueden ser reutilizados para otros fines. También nos obliga a ponernos frente a nuestros desechos y, en consecuencia, a analizar qué tipo de productos consumimos, ponderar nuestras elecciones, identificar el problema y buscar soluciones.