La transición energética es una de las grandes prioridades ante la crisis climática que nos afecta a nivel mundial. Sin embargo, la solución no se encuentra solo en proyectos de energías renovables de grandes empresas, sino también en la incorporación activa de la ciudadanía en su implementación y en la toma de decisiones. Así lo han entendido pequeñas comunidades agrícolas de Colombia que, a través de acciones a pequeña escala, buscan impulsar una transición justa y autogestionada como una alternativa real para las personas en el campo y las ciudades.