Chile ha emergido como líder en la adopción de energías renovables en América Latina y, en particular, en la producción de energía solar. Sus recursos naturales privilegiados sitúan al país en una posición envidiable para transformar su matriz energética. Sin embargo, el boom de proyectos solares camina más rápido que la retirada de centrales a carbón. ¿Estamos reemplazando realmente los combustibles fósiles o solo agregando capacidad renovable al sistema energético?