¿Temporal o definitivo? El desprendimiento de 2.6 millones km2 de hielo marino en la Antártida abre la polémica
La noticia causó gran impacto en los medios masivos en todo el mundo.
"En la Antártida, desapareció un pedazo de hielo del tamaño de Argentina. Son 2.6 millones km² gélidos en el mar que no se recuperaron en el invierno tras los derretimientos del verano. Advierten los analistas climáticos que "ya nunca podrían recobrarse", consignaron las crónicas.
Muchos comunicadores arriesgaron al conocer esta información que el continente helado estaría dando las primeras señales acerca de que el cambio climático está haciendo mella.
Todos los años la superficie marina antártica se mueve al ritmo de las estaciones, pero la gran novedad es que, actualmente, estaría en su nivel más bajo para esta época desde que comenzaron los registros hace 45 años.
Sin embargo, algunos glaciólogos no están de acuerdo con el tremendismo mediático. Proponen no establecer todavía una relación mecánica entre lo que sucede y el "efecto invernadero".
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Varios investigadores sostienen que la agencia norteamericana NASA (Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio) ha demostrado con antiguas y modernas imágenes satelitales que la Antártida es un continente donde el hielo avanza y retrocede de manera cíclica.
Consultado por Carbono.news, Sebastián Marinsek, jefe del Departamento de Glaciología del Instituto Antártico Argentino, explicó: "En principio, no se desprendió ni desapareció ningún bloque de hielo. Lo que se describe es el cambio en la extensión de hielo marino (mar congelado) y eso es lo que ahora tiene un área menor que el promedio de 1980 a 2010. Creo que hubo errores en los títulos de las notas. Las mediciones se hacen desde Estados Unidos cada uno o dos días. Lo que está ocurriendo es que el año pasado tuvimos registros bajos de hielo congelado y este año los datos son aún más preocupantes. Pero, debemos seguir los datos del año próximo hasta encontrar el verdadero motivo de esta mecánica. Las notas, en general, lo reflejan mal debido a los títulos escogidos. Todo consiste en una cuestión sobre cómo comparamos la masa de agua congelada".
También dialogó con Carbono.news el climatólogo e Investigador del Instituto Antártico Argentino, Alpio Costa, quien señaló: "Lo que está sucediendo es poco habitual, se encuentra fuera de la normalidad. Pero me gustaría aclarar que estamos hablando de hielo marino, mar congelado en torno a la Antártida. Es normal que ello crezca y se achique de manera permanente. Ocurre invierno tras invierno, año tras año. He leído en distintos medios que se desprendieron millones de kilómetros cuadrados de hielo. No se desprendió ningún bloque, en realidad. En términos estadísticos, el hielo en torno a la Antártida está en un nivel bajo. Todo el año 2023 viene siendo bajo, hasta llegar a valores récords. Aunque, debemos recordar que hasta 2016, en promedio, el mar congelado venía creciendo. Desde hace siete años, se viene revirtiendo esa tendencia".
La gran preocupación de los ecologistas radica en que si el planeta tuviera menos hielo, la luz solar sería absorbida por el océano en vez de ser rechazada fuera de la atmósfera por las piezas de agua sólida. Se estima que la capa glacial refleja hasta el 90% de este tipo de radiación. Los "espejos refractarios" que suponen los casquetes polares nos protegen cada jornada de los fuertes rayos del astro rey.