Sugestiva seguidilla de sismos cerca de Sauzal Bonito, Neuquén, a pocos kilómetros del fracking de Vaca Muerta
En los últimos dos meses, la localidad, de 300 habitantes, ha experimentado un movimiento telúrico diario.
Sauzal Bonito está ubicada en una geografía muy cercana a las principales explotaciones de gas no convencional. Por esta localidad, en las últimas semanas, han pasado decenas de científicos, autoridades gubernamentales y periodistas para estudiar el fenómeno.
Los vecinos se van a dormir con tranquilidad cada noche, pero cuando están acostados, sienten ruidos, fuertes golpes e inclusive se mueven las casas de manera integral. Rápidamente, protegen a sus niños y comprueban que no se hayan establecido rajaduras en las paredes o los techos.
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Los lugareños apuntan directamente a la producción hidrocarburífera, ya que el inicio de sus pesadillas coincide con el de las hidrofracturas, método para sacar gas no convencional de la roca madre.
En los últimos días, se produjeron importantes desprendimientos de rocas en la zona de Quili Malal, interrumpiendo un camino por el que cada mañana circulan niñas y niños en camionetas escolares. Esta localidad neuquina se ubica a 70 kilómetros de Sauzal Bonito donde, horas antes del desprendimiento, se registró un movimiento de magnitud 4,7 ML en la escala de Richter.
Consultado por Carbono.news, el geólogo Andrés Folguera brindó una muy completa explicación del fenómeno: "En Estados Unidos, se discutió durante mucho tiempo la relación entre el fracking y los sismos. Hoy en día ya no existe tal polémica porque, sistemáticamente, las zonas donde se ha inyectado agua de manera subterránea padecen sismicidad. Está comprobada esta relación".
El prestigioso científico se refirió concretamente al caso de Sauzal Bonito: "Vamos en la misma dirección, porque se repiten los mismos modelos que en Norteamérica: tenemos sismos en Neuquén, en zonas donde jamás se habían registrado. ¿Por qué ocurren los movimientos? Es lógico que al inyectar líquidos usted lubrique los planos de las fallas y esas fallas se desplacen. Concretamente, ingresar agua bajo tierra provoca sismos. Son de magnitudes 4 o 5, no son completamente peligrosos si usted construye con estándares antisísmicos. Pero, si no lo hace (como ocurre en este caso por la falta de antecedentes en relación a los terremotos), podrían verse afectadas las viviendas y construcciones locales".
Folguera propone asumir la realidad y buscar soluciones concretas: "Para minimizar los riesgos, debemos aceptar lo que está ocurriendo. Yo no estoy, a priori, en contra del fracking porque soy consciente que nuestro país necesita desarrollarse. Los problemas de contaminación que provoca este sistema son graves y debemos también aceptarlos. Debemos aprender de países que recurren a estas soluciones desde hace ya varios años para poder evitar el pasivo ambiental".
La sismicidad vino para quedarse, ya que Argentina tiene la segunda reserva mundial de shale gas y la cuarta reserva planetaria de petróleo no convencional.