¿Qué es la pesca sostenible?
¿Puede la industria pesquera y el ambientalismo unirse por un mismo objetivo? Pesca sostenible: impulsar la sostenibilidad a largo plazo de las pesqueras y el equilibrio de los ecosistemas y el ambiente marino en su conjunto.
Hace algunas semanas, en el marco de una reunión convocada para hablar sobre las implicancias ambientales del ya retirado proyecto de "Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" escuché hablar sobre "pesca sostenible". La persona detrás de las palabras decía que este proyecto de ley había logrado lo que ningún otro: reunir al ambientalismo con la industria pesquera en un mismo reclamo.
El proyecto de ley en sus artículos 242 a 253, intentaba promover una importante reforma al Régimen Federal de Pesca, instrumentando un cambio radical al espíritu del mismo procurando, entre otras cosas, abrir el caladero a la llegada de buques extranjeros sin más antecedentes que el cumplimiento de los estándares de seguridad para el otorgamiento y mediante la modalidad de licitación internacional de las cuotas de captura para las especies actualmente cuotificadas o bien de autorizaciones de captura para las que no lo están; sin la obligatoriedad de desembarcar los productos de la pesca en puertos argentinos ni de llevar una mayoría de tripulantes argentinos como establece la actual legislación.
Quién exponía era Martina Sasso, co-fundadora y directora de fundación de conservación marina Por El Mar y decidí contactarme con la fundación para aprender más sobre el tema.
Carbono News (CN): ¿Cómo es que se terminan uniendo esos dos actores en este reclamo?
Por El Mar (PEM): Las controversias generadas por las modificaciones al Régimen Federal de Pesca (Ley 24.922) propuestas en la "Ley ómnibus", pusieron de manifiesto la importancia que tiene tanto para la industria como para el ambiente, una gestión responsable e informada de los recursos a fin de garantizar la sustentabilidad de las pesquerías. Gracias a los esfuerzos realizados por las industrias pesqueras, las provincias con litoral costero y las ONGs de conservación ambiental, se logró sacar el capítulo que establecía las modificaciones al régimen federal pesquero (independiente de que después el proyecto de ley ómnibus fuera retirado).
CN: Me interesó el concepto de "pesca sostenible" ¿Qué es? ¿Existe en nuestro país?
PEM: La pesca sostenible debe ser un pilar que determine desde las prácticas pesqueras de cada embarcación hasta la gestión de la industria. Y en ello es fundamental la cuotificación de todas las especies de valor comercial para garantizar la sostenibilidad de estas pesquerías. Para hablar de "pesca sostenible" en Argentina, queda mucho camino por recorrer. La ley de pesca tiene que actualizarse y cambiar. Pero no con los cambios que proponía la "ley ómnibus". Actualmente sólo 5 especies están cuotificadas en nuestro país.
CN: Me acuerdo de haber leído la palabra "cuotificación" en el proyecto de ley... ¿Qué significa?
PEM: La cuotificación es un sistema creado para otorgar sustentabilidad a las pesquerías. La captura máxima permisible, que está evaluada por el instituto nacional de investigación y desarrollo pesquero (INIDEP) y luego informada al consejo federal pesquero (CFP), es justamente para evitar un saqueo de la pesquería. Sin ir más lejos en los años 90 colapsó una de las pesquerías centrales en la Argentina, la de la merluza hubbsi o común y al introducir la cuotificación de la pesquería esta se recuperó. La idea de abrir cuotas al mejor postor (que es lo que pretendía el proyecto) solo atenta contra la sustentabilidad del recurso, una mirada muy cortoplacista. Los pocos países que implementan este sistema ya han extinguido varias especies en sus caladeros. La vida marina forma parte de un ecosistema complejo. El mar argentino debe ser administrado de forma sostenible. Un ambiente marino sano genera recursos para el país, para las provincias y su gente.
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CN: Antes mencionaban que hay cambios que sí son necesarios ¿Cuáles serían?
PEM: En conversación con otras organizaciones ambientales y actores del sector pesquero, estamos de acuerdo con que la regulación actual puede mejorarse. Deberíamos ir hacia la cuotificación de todas las especies. De hecho si se quiere tomar como modelo el libertario, que es al que dice apuntar el gobierno actual, muchos países libertarios cuentan con todas o la mayoría de sus especies de interés comercial cuotificadas. Actualmente sólo 5 de las especies del mar argentino están cuotificadas, especialmente la merluza. Con excusas como el ciclo de vida, otras especies como el langostino o calamar no se encuentran cuotificadas, supuestamente por tener un ciclo de vida corto la industria entiende que puede sacar todo el volumen posible de la especie, dejando de lado que es necesario dejar en el mar a un grupo reproductor que garantice la sustentabilidad de la pesquería.
Además se necesita de un correcto financiamiento y gestión de organismos como el INIDEP, ya que es fundamental para que todas las investigaciones necesarias sean llevadas a cabo en tiempo y forma. Así como también el apoyo a la investigación científica para proporcionar las bases de una gestión responsable e informada de los recursos.
Es fundamental llevar a la práctica un abordaje interdisciplinario en el que la investigación científica independiente, el desarrollo tecnológico y las prácticas de la industria funcionen de forma articulada con el objetivo de impulsar la sostenibilidad a largo plazo de las pesquerías y el equilibrio de los ecosistemas y el ambiente marino en su conjunto.
CN: Para entender su importancia... ¿Qué rol cumple el INIDEP?
PEM: Actualmente el rol del INIDEP es muy importante, ya que indica al Consejo Federal Pesquero, cuántas toneladas se pueden pescar de las diferentes especies. Esta indicación se basa en los estudios científicos que realizan y se expresa en un rango de volumen de captura, con diferente nivel de riesgo de colapsar las pesquerías en cada caso, por ejemplo: "se puede pescar de 20 a 30 toneladas, 20 teniendo un riesgo del 5%, 30 teniendo un riesgo del 15%." Y a partir de estos datos, el CFP reparte las cuotas.
CN: ¿Puede haber industria y protección del ambiente al mismo tiempo?
PEM: Desde el punto de vista ambiental, sin sostenibilidad pesquera, se genera un desbalance ecológico que impacta en otras especies que dependen de esa pesquería, pueden ser otros peces de valor comercial, así como pueden ser ballenas, delfines, lobos marinos y por ende afectar matrices productivas como el turismo. Y para la industria pesquera, sin sostenibilidad pesquera, se termina el negocio. Encontrar este equilibrio nos ayuda a preservar los servicios ecosistémicos, que son los beneficios que la naturaleza aporta a la sociedad. Estos servicios sólo pueden existir si el ambiente se encuentra en condiciones saludables.
CN: ¿Hay algún vínculo entre la pesca sostenible y el cambio climático?
PEM: Claro, según el Informe de los Objetivos de Desarrollo Sostenible del año 2023, el océano está en estado de emergencia y uno de los motivos es que la pesca excesiva ha provocado el agotamiento de más de un tercio de la población de peces en todo el mundo. Esto a su vez rompe las cadenas tróficas de las cuales dependen los ecosistemas marinos y socava la habilidad del océano para cumplir funciones ecosistémicas clave, como la absorción de carbono, que es esencial en la mitigación del cambio climático. Por eso la pesca sostenible, y la conservación del ambiente marino son fundamentales para garantizar el bienestar de los recursos naturales y el de las personas que de estos dependen, incluyendo las generaciones futuras.
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Desde PEM estamos desarrollando actividades que impulsan ese equilibrio. Por eso, no sólo trabajamos con la creación de áreas marinas protegidas y la protección de los bosques de macroalgas o de especies clave, sino que también impulsamos proyectos de desarrollo sostenible como el cultivo regenerativo de algas, siempre de la mano de las comunidades costeras.