Por segundo año consecutivo, el Rio Rin se seca y se multiplica por diez el costo del transporte fluvial

El Rin tiene una longitud superior a los 1200 km de los cuales casi 900 son navegables, los comprendidos entre Basilea (Alpes de Suiza) y su delta de salida en el Mar del Norte. Pasa por Francia (Estrasburgo), Alemania Colonia-Bonn-Düsseldorf) y los países bajos (Róterdam, el puerto más importante de Europa).

Franceses y alemanes lucharon por su control en numerosas oportunidades ya que siempre fue estratégico para el comercio y la generación de riquezas. Las industrias textil, química, siderúrgica, automotrices y vitivinícolas le deben buena parte de su éxito dentro de las mayores economías europeas.

Gracias a un costoso sistema de canales, el Rin se comunica con el Mar Báltico, el Mediterráneo y el Océano Atlántico. Además, durante los meses más cálidos, cientos de miles de personas se bañan en sus aguas.

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Sin embargo, las corrientes están a punto de volverse prácticamente intransitables a medida que se tornan poco profundas y obstruyen el paso de los envíos. Uno de los indicadores de Fráncfort está mostrando una hondura crítica: apenas 40 centímetros, según la Administración Federal de Vías Navegables germana.

A ese nivel, resulta imposible el tránsito de la mayoría de las embarcaciones con calado de cinco pies que transportan las mercancías energéticas más básicas: los convoyes suelen trasladar diésel, carbón y gas licuado. Empresas gigantescas como la química BASF y la siderúrgica Thyssenkrupp dependen de esta alternativa para abastecerse de materias primas.

Las contribuciones de los glaciares alpinos, luego de un verano demasiado cálido, han disminuido en cuanto a derretimientos. Las nevadas de fines de 2022 y principios de 2023 volvieron a estar por debajo del promedio y eso generó un continuo desgaste de glaciares que se hallan perdiendo su tradicional volumen.

El Rin se está volviendo antieconómico para la mayoría de las unidades de transporte y eso es una muy mala noticia.

Actualmente la tarifa para transportar combustible hasta Basilea es diez veces más cara de lo que se pagaba hasta hace pocas semanas. Ahora, se abonan 267 euros por tonelada en comparación con los 25 euros que se abonaban en junio, según datos de Insights Global.

Consultado por Carbono.news, el ingeniero Juan Borus, director de Alertas Hidrológicas del lNA (Instituto Nacional del Agua), expresó: "Europa ha sufrido un fuerte estrés hídrico en los últimos dos veranos. Están soportando una sequía similar a la del año pasado. Estos fenómenos vienen en bienios y trienios. Esto lo pudimos comprobar en Argentina, donde tuvimos una triple Niña en la zona más productiva. También, le está ocurriendo una vez más a Uruguay y, especialmente, a Montevideo. Hace poco más de tres años, en abril de 2020, no había prácticamente un centímetro cuadrado en toda la Cuenca del Plata que no estuviera complicado por la escasez de precipitaciones". 

Y agregó: "Hay que entender que las sequías son persistentes. Aparecen gradualmente y desaparecen también de manera gradual. Además, las regiones que abarcan son muy grandes, gigantescas. Europa lo está comprobando y lo mismo sucede en Rusia donde la falta de aguaceros es dramática, con algunos de los registros más exiguos que se recuerden. La atmósfera es una sola y está alterada de manera muy enérgica, con demasiados cambios en tan poco tiempo".