Los autos "enchufables" la rompen en Europa, mientras en Argentina tienen trabas
Por un "olvido" del Gobierno Nacional, los autos híbridos y eléctricos que ingresaron a la Argentina pagan más impuestos.
En el viejo continente las ventas de coches eléctricos de varias compañías siguen creciendo y arrojan cifras positivas en un marco de altísima competencia entre automotrices.
Se estima que al menos uno de cada siete coches vendidos el año próximo en los países de la Unión Europea será un vehículo no contaminante.
Los consumidores están cada vez más concientizados en la preservación del medio ambiente pero, además, existen ventajas que están consiguiendo que estas unidades tengan precios más económicos cada año.
Gracias a que no emiten gases de efecto invernadero, se hallan exentos de varios impuestos que deben pagar sus rivales nafteros o impulsados por diésel, como parte de las políticas de favorecimiento a las energías verdes.
Al volverse tan masivos, los silenciosos rodados están colapsando la red de puntos de carga. Por ello, se están colocando enchufes en plena calle, en sitios destinados al libre estacionamiento.
Las ventas de estos vehículos crecieron un 93,8% en Europa en 2019 y todo indica que ese porcentaje hubiera aumentado mucho en 2020 de no mediar la pandemia de coronavirus.
De acuerdo a la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) los tres países que más apuestan por esta novedad amigable son:
- Reino Unido (+144% interanual)
- Italia (+113,3% interanual)
- España, donde casi la mitad de los automovilistas asegura que comprará una unidad ecológica en el futuro cercano.
Los modelos más vendidos fueron el Tesla Model 3, el Toyota Corolla y el Mitsubishi Outlander. Su autonomía eléctrica llega hasta los 65 ó 75 kilómetros de distancia y su velocidad máxima trepa hasta 135 km/h.
Mientras, en Argentina...
Por un "olvido" del Gobierno Nacional, los autos híbridos y eléctricos que ingresaron a la Argentina pagan más impuestos. La Casa Rosada no renovó en 2020 un decreto de beneficios arancelarios para vehículos impulsados por energías alternativas, que nació en mayo de 2017.
Esa normativa establecía un impuesto aduanero del 5% para los autos híbridos y de apenas 2% para los totalmente eléctricos.
Antes de esa norma, debían abonar un 35%: la misma alícuota que pagan los autos importados con motores de combustión interna convencional.
Luego de 36 meses de experiencia, se eliminaron las ventajas. Por ello, la tasa para las unidades impulsadas con energías alternativas retornó a su guarismo original.