Se multiplican en Necochea los emprendimientos impulsados por energías renovables

Cientos de miles de argentinos visitan la ciudad balnearia de Necochea durante los meses de verano. Sus playas se colman y lo mismo ocurre en la época estival con los departamentos ubicados en grandes torres frente al mar. Sin embargo, fuera de la temporada alta, la comunidad sigue muy activa y sus miembros han comenzado a destacarse como una vanguardia nacional en la puesta en marcha de energías renovables.

El año pasado, la empresa Genneia comenzó a operar allí un Parque Eólico con una potencia de 38 megavatios. Los vientos en esa zona son tan importantes que permiten "cosechar" electricidad para atender el consumo de más de 50 mil hogares.

Las panaderías, las estaciones de servicio, los minimercados, las farmacias, los carteles luminosos y buena parte de la actividad agropecuaria local, ya se nutren con kilovatios llegados desde aerogeneradores y paneles solares. Los necochenses miran con orgullo a una de sus panaderías emblemáticas, La Paz, ya que el establecimiento se destaca por haber incorporado un sistema de autogeneración de energía sostenible. Es la primera empresa argentina de ese rubro que cuenta con un sofisticado andamiaje de paneles solares y molinos de viento. El beneficio es doble: se contamina menos el medio ambiente y, al mismo tiempo, se economizan gastos, ya que se trata de un recurso menos costoso con un mantenimiento prácticamente nulo.

Las distintas obras fueron llevadas a cabo por alumnos y ex alumnos del Centro de Formación Profesional 402. Este proyecto innovador fue concebido con la intención de vincular, de manera virtuosa, la educación pública con los negocios privados.

Consultado por Carbono.news, Norberto Cafiel, profesor del CFP 402, explicó: "Los alumnos y ex alumnos que transitan los cursos en energía renovable realizan la instalación y puesta en funcionamiento de los sistemas dentro de la modalidad práctica profesionalizante. Lo realizan sin costo alguno para la firma que pone a disposición su local a fin de contribuir con la educación de nuestros chicos. En la zona agropecuaria, estamos ayudando también a calefaccionar los criaderos de cerdos, ya que el ganado porcino sufre mucho el frío. Se conectan las fuentes verdes para pasarnos del sistema tradicional al de batería durante los momentos en que baja la tensión. La caída en el precio del kilovatio oscila entre un 35 y un 40 por ciento, gracias a los molinos y las plaquetas fotovoltaicas. Hemos terminado con los cortes de luz y ya no existen más pérdidas".

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Los alumnos y egresados de esta primera tecnicatura en energías sustentables llevan sus conocimientos hasta regiones tan distantes de Necochea como Lago Puelo, en Chubut o pequeñas localidades de la provincia de Salta. Demuestran a diario que con inversiones mínimas se puede cambiar la historia.