Edimburgo, la ciudad más sustentable de Europa, prohíbe autos contaminantes en su casco histórico
La segunda ciudad más poblada de Escocia (medio millón de habitantes) ha sido coronada como la urbe más ecológica del viejo continente
Edimburgo alcanzó el título de ciudad más sustentable de Europa gracias a sus políticas y acciones encaminadas hacia la preservación del medioambiente y el bienestar de sus habitantes. Un estudio realizado por DiscoverCars le otorgó una valoración de 89 sobre 100 puntos posibles.
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El reconocimiento se fundamentó en temas clave como:
importante presencia de restaurantes veganos
abundancia de espacios naturales
ayuda de las autoridades para que todas las familias puedan reciclar la basura en sus casas
bajos niveles de contaminación ambiental
ciudad histórica que conserva su rico patrimonio cultural.
Consultada por Carbono.news, Florencia, una ciudadana argentina que vive hace 18 años en Highland, detalló: "En junio arranca la zona verde, por lo que no podremos entrar al centro con vehículos que tengan alto impacto en el medioambiente. Solamente podrán hacerlo los eléctricos o los que generen baja contaminación. Es una modificación definitiva. Mi camioneta ya no podrá ingresar. Hay muchísimos autos eléctricos. Yo tengo un negocio y me mandan de manera periódica ofertas para que me convierta a la electromovilidad. Nos ofrecen ayuda económica para la transición".
Los hábitos de conservación del ambiente están acendrados y se les inculcan a los niños desde la más temprana edad.
Y continuó: "Escocia es un país muy enfocado para ser completamente green. Encontrás cargadores eléctricos en los sitios más remotos. Hace poco viajé a un pueblito que era apenas una hilera de casas y frente a los acantilados tenían un punto de alimentación de este tipo. Me impresionó. El tema del reciclado está ya muy avanzado, existe en todos los supermercados la posibilidad de hacerlo con los envases y en todas las viviendas tenemos elementos que nos entrega el gobierno para separar en origen. Cada dos semanas pasan a buscar cartón, vidrio o metales".
Finalmente, Florencia explicó que también existe la punición para los infractores, especialmente para los reincidentes: "Cuando voy a Londres, por ejemplo, a pesar de ser una ciudad limpia, siento que hay más contaminación que en Edimburgo. Las multas que aquí te aplican por entrar al centro con vehículos no permitidos son altas y acumulativas: pasan de 60 libras a 120 ò bien 180 si reincidís".