BrasUp: carbón eco-friendly para asar sin dañar la naturaleza
Sin consumir madera, acumula varias ventajas en comparación al tradicional, contó su creador, Facundo Cabrera, a Carbono News.
El carbón mineral es utilizado para la industria. Especialmente, para la siderurgia que necesita temperaturas elevadísimas para poder funcionar. El vegetal es el que se utiliza en las parrillas para calentar carne o cualquier tipo de comida. Esa madera dura es ideal para que los fogoneros puedan dorarla de mil maneras distintas.
Pero, desde hace cinco años, existe la chance de conseguir una tercera opción. Se trata del carbón ecológico, que se obtiene de restos de cascarillas de arroz, maníes o cocos.
Facundo Cabrera, el empresario que fundó BrasUp, la firma pionera en este rubro, le contó a Carbono News acerca del rápido crecimiento del emprendimiento y de los planes de expansión.
"El precio del producto es muy similar al de los materiales de encendido que existen en el mercado. Estamos oscilamos entre un dólar en el interior de Argentina y un dólar con veinte centavos en la ciudad de Buenos Aires para las bolsas de cinco kilos. Nuestro objetivo para este 2021 es conseguir un lugar en las góndolas de las principales cadenas de supermercados. No aspiramos a convertirnos en un producto premium o sofisticado".
Facundo, correntino, llegó con apenas 18 años a Buenos Aires para estudiar cine y publicidad. Siguió el mismo camino que cientos de miles de inmigrantes del interior, en la primera mitad del siglo XX. La pasión de los provincianos por los asados logró conquistar una sociedad que hasta entonces no cocinaba prácticamente con parrillas. Hasta entonces, casi todas las comidas eran preparadas en cacerolas o sartenes.
Casi un siglo más tarde, este hombre llegado desde tierras lejanas quiere revolucionar la forma de preparar los asados. En su caso, gracias al desperdicio que generan las grandes compañías arroceras.
Con respecto a las desigualdades entre el producto tradicional y esta novedad que reutiliza la basura orgánica, el emprendedor detalló al menos cinco diferencias:
"La primera gran disimilitud se relaciona con que nosotros no afectamos a las especies autóctonas. No talamos árboles. Utilizamos desechos de todo tipo de cultivos para triturarlos, aglutinarlos y luego carbonizarlos. Cada 750 bolsas que vendemos, le salvamos la existencia a un quebracho blanco de siete metros de altura y 200 años de antigüedad", comenzó diciendo.
"La segunda tiene que ver con que no le cambiamos el sabor a la comida, porque BrasUp no despide humo y el gusto de lo preparado es el original. La tercera es muy interesante: este material amigable con el medioambiente es mucho más duradero en las parrillas. Las brasas se mantienen encendidas durante lapsos más prolongados", siguió.
Y finalmente añadió: "La cuarta también es significativa: nuestros materiales no manchan. La quinta, por último, es que no chispea, no propaga el fuego, no constituye amenaza para bosques o sitios con pastos secos".
Cabrera, que apenas supera los treinta años de edad, es optimista en poder llevar su know how al resto del mundo.
"En casi todo el subcontinente no existía hace un lustro el carbón ecológico. Ya nos han pedido que hagamos franchising en distintos lugares. Quieren que llevemos nuestros materiales a Arkansas, Estados Unidos (la capital del arroz), a Europa y también a Sudamérica. Sin embargo, creemos que el traslado de tantos kilómetros de una mercadería liviana y barata es mal negocio. Resultaría antieconómico. Por ello, estamos dispuestos a compartir nuestro modelo de negocios con emprendedores del resto del planeta. En Brasil, por ejemplo, hay mucho coco que se industrializa y deja vastos rezagos. En Córdoba, ocurre con la cáscara de maní y en Mendoza pasa lo propio con las nueces", enumeró Cabrera.
"Conviene que ellos hagan lo que practicamos en Corrientes: aprovechar los restos que se arrojan a la basura. Nuestro sueño es multiplicar la sustentabilidad y ayudar a la lucha contra el calentamiento global. Estamos creando valor en zonas como la Mesopotamia, donde la producción siempre fue en buena medida primaria", cerró.
Argentina es uno de los mayores exportadores mundiales de carbón vegetal. ¿Logrará también destacarse en esta nueva y prometedora actividad?