Activismo
Economía circular

Desde octubre, los franceses podrán acceder a fuertes descuentos si remiendan su propia ropa y calzado

Las quitas oscilan entre los 6 y 25 euros si el cliente puede probar con facturas que recicló zapatos, pantalones, sacos o camisas.

Las personas que lleven sus pertenencias a reparar obtendrán beneficios relacionados con la complejidad de cada uno de los trabajos encargados. Por ejemplo, se podrán reclamar siete euros por arreglar los tacones.

Por su parte, los sastres, modistas, zapateros y costureras recibirán bonos del gobierno para compensar las rebajas ofrecidas a sus clientes. La idea es que cada prenda sea aprovechada por mayor extensión de tiempo y de esta forma se logre reducir la basura generada por la "capital mundial de la moda".

Fuente: Pixabay

La industria textil de esta potencia genera 700 mil toneladas de desechos cada año, según datos oficiales difundidos por la Secretaria Nacional de Ecología, Bérangère Couillard.

Para contener semejante nivel de contaminación, el Estado galo pergeñó este paliativo que cuenta con un impulso vehemente por parte del presidente Emmanuel Macron.

El programa Refashion comenzará a desarrollarse con un presupuesto de 154 millones de euros que se repartirá durante cinco años (entre 2023 y 2028).

Se trata de una medida similar a la que ya fue aplicada en diciembre pasado por los galos con los electrodomésticos.

El Palacio Elíseo informó que en 2022 se comercializaron 3300 millones de productos textiles, entre prendas y calzado, por lo que se busca limitar dicha cifra de manera sustancial.

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En Francia ya existe la ley antidesperdicio y de economía circular que contó con un fondo de mil millones de euros recaudados por las empresas textiles.

Laurencio Adot. Fuente: Instagram

Consultado por Carbono.news, el conocido diseñador Laurencio Adot explicó: "Todos merecemos una segunda oportunidad. Yo soy la prueba viva de ello. Tuve un ACV en 2018. Tengo 56 años de edad y cinco de cerebro. Mi padre y mi abuelo estuvieron relacionados con la industria textil. Mi mamá fue mi mano derecha en el atelier. Es fascinante el reciclado de cada prenda".

Su nombre apareció muchas veces en la revista Vogue, la biblia de la moda, y entre sus clientas famosas figuran Julieta Prandi, Laurita Fernández, Paula Chávez, Nicole Neumann, Sofía Zámolo y Candela Ferro.

"Me rehabilité por la fuerza en Dios y por mí. Por el ACV dejé de lado la frivolidad. Luego de la pandemia, hay más empatía con la gente. Ya no se trata de ser estrafalario sino hacer lo que se necesita. Estoy trabajando en proyectos solidarios en los que me involucro. Soy un milagro, porque era un vegetal y ahora estoy caminando. Todo esto me dejó una enseñanza y es que hay que ser positivo. Por mi vida pasó un tsunami que me hizo cambiar de hábitos y de pensamiento. Entendí que antes de todo hay que poner el esfuerzo en la calidad de vida y en la salud. Por eso, celebro este tipo de iniciativas como las que llevan adelante desde el gobierno francés", cerró Adot.

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