¿Lula ecologista? "Dime con quién andas y te diré quién eres"
En su campaña presidencial, buscando un tercer mandato, Luiz Inácio Da Silva buscó diferenciarse en cuestiones ecológicas de su principal rival, Jair Bolsonaro.
Durante la campaña eleccionaria, Lula acusó a Bolsonaro de ser un "ecocida" y de no proteger debidamente las regiones selváticas. Sumó como ministra de Medio Ambiente a la luchadora verde Marina Silva e invitó a las grandes potencias mundiales a designar a Brasil (Amazonia) como la sede de la próxima COP.
Logró que el presidente de Estados Unidos anunciara una solicitud al Congreso norteamericano para enviar 500 millones de dólares al Coloso Sudamericano con el fin de combatir el cambio climático.
Lula aseguró que su país estaría "de vuelta" en la escena internacional tras cuatro años de gestión aislacionista de su predecesor.
El peor de los "regresos"
En los últimos días, el flamante Jefe de Estado provocó una enorme tensión diplomática con Washington y la Unión Europea tras acusarlos de contribuir para que persista la guerra en Ucrania. En sus críticas, realizadas durante su visita a China, también responsabilizó a Ucrania por el inicio de la ilegal invasión rusa.
Lula criticó la asistencia militar que Washington y Bruselas están brindando a Kiev al afirmar que "Estados Unidos tiene que dejar de fomentar la guerra y empezar a hablar de paz". También llamó a la UE a "empezar a hablar de paz".
Desde Abu Dabi, Lula sostuvo que "la construcción de la guerra es más fácil que la salida de la guerra, porque la decisión de la guerra la tomaron los dos países". No hizo más que reafirmar lo que declaró el año pasado en una entrevista a la revista Time, cuando dijo que Zelensky es "tan responsable" como Putin.
Da Silva sugirió a Ucrania ceder la península de Crimea a Rusia para facilitar el fin del conflicto al afirmar que Zelensky "no puede quererlo todo".
Joe Biden, a través de su portavoz John Kirby, llegó a calificarlo como un "loro de Xi Jinping". No se recuerdan cruces tan graves entre dos potencias que han sido tradicionalmente aliadas en materia de política exterior.
En busca de un "greenwashing express", por estas horas, el ex gremialista se encuentra recorriendo el viejo continente tratando de aclarar el tenor de sus desafortunadas afirmaciones.
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En esta mini-gira buscará una oportunidad para hacer "reajustes" y demostrar que él también cree en la visión de la democracia occidental, a pesar de haberse mostrado tan condescendiente con regímenes denunciados por violaciones a los derechos humanos y por crímenes de guerra.
En un bosque de la China, Lula se perdió
La confusión geoestratégica de Luiz Inácio lo llevó a afirmar que Pekín juega hoy un papel importante a favor de la paz mundial y el mejoramiento de las condiciones de vida humanas. ¿Serán los mismos dirigentes comunistas que despliegan barcos, aviones y tropas en el Estrecho de Formosa para amedrentar y asediar a Taiwán, su eterno rival? ¿Se tratará del mismo presidente chino Xi Jinping que promete recuperar pronto la isla "por las buenas o por la fuerza"? ¿Será la misma potencia que acaba de sostener que "los lazos de unión con Rusia son más fuertes en la actualidad que durante la Guerra Fría"?
A pesar de declararse neutral en la disputa geopolítica entre Estados Unidos y China, Brasil parece haberse alineado claramente con las autocracias.
Además, ¿se puede alcanzar un liderazgo planetario en materia de sustentabilidad mientras se tejen amistades cada vez más estrechas con el país más contaminante del mundo?
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La Organización Mundial de la Salud y la Agencia Internacional de la Energía ubican al dragón asiático como la nación que más contamina, ya que utiliza el carbón como una de sus principales fuentes de electricidad:
el 70% de sus playas se encuentran contaminadas,
el aire en sus principales ciudades es irrespirable,
los turistas extranjeros reciben en los hoteles botellas con agua mineral para que ni siquiera se hagan buches bajo la ducha con el agua local
Beijing sufre reiteradas alertas rojas en materia medioambiental: la ciudad registra 993 microgramos de concentración de polución cuando la OMS considera aceptable tan sólo 25 microgramos
la población del gigante comercial registra el mayor número de casos de problemas respiratorios en todo el planeta
Durante la campaña electoral, Lula tuvo un fenomenal apoyo de los sectores que buscan un salvataje inmediato del "pulmón" más grande de la Tierra. Pero, sus alianzas con quienes en 14 meses han cometido decenas de miles de crímenes de guerra (asesinatos de niños, violaciones de mujeres, decapitaciones de soldados) y con los mayores contaminadores seriales globales hacen pensar si no fue todo parte de un sketch, una mise en scène, un mero "fulbito para la tribuna" para llegar de cualquier manera al Palacio del Planalto.